“HE VISTO COSAS QUE VOSOTROS NO CREERÍAIS. ATACAR NAVES EN LLAMAS MÁS ALLA DE ORION. HE VISTO RAYOS C BRILLAR EN LA OSCURIDAD CERCA DE LA PUERTA DE TANNHAUSER….TODOS ESOS MOMENTOS SE PERDERÁN EN EL TIEMPO COMO LAGRIMAS EN LA LLUVIA. ES HORA DE MORIR.”

Estas frases corresponden a una de las secuencias inolvidables de la película de culto ´BLADE RUNNER`.

En 1982 se estrenó BLADE RUNNER, dirigida por Ridley Scott y basada en el libro de Philip K. Dick, ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?. Este escritor se ha vuelto muy famoso en los últimos tiempos, pues sus obras han servido de inspiración a películas como 'Desafío Total' o 'Minority Report'. Hoy en día se le considera uno de los autores más destacados del género de la ciencia ficción, junto con Ray Bradbury, Aldous Huxley e Isaac Asimov.

Hasta que Ridley Scott dirigió esta película sólo contaba en su haber con un filme (“Los Duelistas”, basado en un relato de Joseph Conrad), y posteriormente en un período de tres años rodó dos obras maestras: 'Alien, el octavo pasajero' (1979) y 'Blade Runner' (1982).

La película, considerada por muchos amantes del cine como una de las mejores de la ciencia ficción, narra la persecución por parte de un policía retirado, blade runner (Harrison Ford), de un grupo de fugitivos o “replicantes”.

La acción transcurre en Los Angeles en el año 2019. En un mundo polucionado y próximo, donde las clases altas se han "mudado" hacia colonias espaciales, y la Tierra ha quedado como un vertedero donde las continuas precipitaciones nocivas y las aglomeraciones humanas son moneda corriente.

Cuatro Replicantes Nexus 6 (androides de carne y sangre, de plástico y compleja circuitería, casi indistingibles de un ser humano) se fugan de su destino esclavizante y arriban a la Tierra, en búsqueda de su "Creador".

Su vana búsqueda de respuestas y su anhelo de perdurar como humanos "normales" ya que por diseño, sólo duran cuatro años, terminan por enfurecerlos y destruyen a sus creadores, el magnate científico Tyrell, y el diseñador Sebastian.

Las autoridades ordenan su búsqueda y eliminación inmediata, como es ley para cualquier Replicante "desprogramado". Se hace cargo del caso el experto y ya retirado policía Rick Deckard, un "Blade Runner" de innata capacidad para encontrar las Réplicas. Va cazándolos uno a uno, obteniendo la inesperada ayuda de la asistente de Tyrell, la bella Rachael (Sean Young ),siendo ella también una perfecta Replicante).

Descubriendo su creciente sentimiento y deseo por Rachael, va cumpliendo su misión hasta que, en el encuentro final con su líder Roy Batty (Rutger Hauer), el Replicante lo vence y ya a punto de matarlo, Roy se solidariza con su vida y lo perdona, para morir él en paz consigo mismo, adquiriendo piedad y autoconciencia, y por tanto, experimentando su anhelada "muerte humana". Como final inesperado, Deckard se convierte también ahora en un fugitivo porque escapa junto con Rachael, en lugar de eliminarla.

Su consideración como "película de culto" se justifica porque en la misma se abordan varios géneros típicamente cinematográficos. Con una estética que podríamos denominar ciberpunk nos narra una historia de ciencia ficción pero con los personajes y el “tempo” de una película de cine negro. A esto se añade una historia de amor entre el detective y una mujer implicada en el caso, característico de las películas del género cinematográfico mencionado.

Pero su carácter de película de cine negro se fortalece más al incorporar la voz en off de Rick Deckard que dota al personaje de una introspección psicológica que es fundamental en el devenir de la película así como en las cuestiones que plantea al espectador.

Además, en los despachos predomina una oscuridad sólo rasgada por los haces de luz que penetran a través de los intersticios de las persianas. Los ventiladores giran sus aspas con una cadencia tan perezosa como los movimientos de los personajes. La gabardina de anchas solapas es la indumentaria más repetida. Los personajes tienen rostros inexpresivos.

El ambiente por el que se mueven los personajes, la ciudad de Los Ángeles en el año 2019, está impregnado de una neblina persistente producida por la lluvia ácida. El tono verdoso que adquieren algunas escenas representa la toxicidad del ambiente, la eterna noche lluviosa, con el cielo encapotado, la falta de luz solar o plantas. Todo ello crea un ambiente angustioso y desesperanzador para la humanidad, un clima agobiante que no te deja ver más allá, edificios repletos de publicidad y construcciones colosales similares a las pirámides, todo brilla como un reflejo de las estrella.

La película sugiere preguntas vitales como qué es lo que nos hace humanos o si la ciencia y la tecnología deben regir nuestras vidas sin ningún tipo de control. El film es una constante crítica social, no sólo a la progresiva despersonificación del hombre, también a la contaminación y a la globalización, representada por una clara victoria de Oriente sobre Occidente.

No obstante, la película no nos ofrece ninguna respuesta dejando a la libre reflexión la contestación a las mismas.

La banda sonora de esta película fue compuesta por Vangelis y es una de las mejores bandas sonoras de la Historia del Cine. Siempre quedará en nuestro recuerdo el saxofón que se escucha cuando Deckard está sentado frente al piano con una mirada ausente (“Love Theme”) La melodía que pone fin a la película (“End Title”) ha sonado en nuestra cabeza desde entonces y además por ser sintonía de diversos programas televisivos

Como epílogo me gustaría decir que “Blade Runner” fue un estrepitoso fracaso en su día. Los críticos la vapulearon y el público le dio la espalda. Es un ejemplo de que lo excepcional en el universo del cine sólo es aceptado después de haber transcurrido muchos años. De esto ya conocemos otros ejemplos.